La luz y la sombra vienen muy bien para representar una realidad pero también es necesario encontrar una
organización del encuadre. Para ello se emplear las
líneas de corrección. Estas son en su mayoría rectas que siempre van desde y hasta los extremos del papel. Con ellas se pueden corregir las pendientes del dibujo y encontrar
relaciones entre ciertos objetos o los contornos de estos.
Por otra parte estas correcciones también nos llevan a
ajustar los encuadres, ya que en algunos casos hay
información irrelevante. Esta información suele ser aquella que se puede suponer de otra parte del dibujo.
El resultado de cada día han sido cada una de las siguientes series:
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1 |
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1.1 |
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1.2 |
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1.3 |
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1.4 |
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1.5 |
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2 |
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2.1 |
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2.3 |
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2.4 |
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